El neerlandés Max Verstappen (Red Bull) apunta a un quinto título (seguido) en el Mundial de Fórmula Uno, que arranca este fin de semana en el circuito de Albert Park de Melbourne, sede del Gran Premio de Australia. Eso, con el permiso de McLaren, ganadora del campeonato de constructores el año pasado, y de la ‘nueva’ Ferrari, para la que buscará la gloria el inglés Lewis Hamilton, el piloto más exitoso de todos los tiempos.
El ‘hombre-récord’ recala en la escudería más laureada de la historia, que -no obstante- lleva sin ganar el Mundial desde 2007: cuando lo hizo por última vez el finlandés Kimi Raikkonen. El fichaje de Sir Lewis por Ferrari se convirtió en la noticia bomba antes incluso de que arrancase la pretemporada del curso pasado. El séptuple campeón mundial, de 40 años -asimismo plusmarquista histórico de victorias (105) y poles (104) en la F1-, es el nuevo compañero del monegasco Charles Leclerc en la ‘Scuderia’, en la que sustituye al español Carlos Sainz, que a partir de este año compite para Williams.
Verstappen puede igualar a Fangio y emular al ‘kaiser’
Tras ganar su primer título en la última vuelta de la última carrera, Verstappen, de 27 años, ‘arrasó’ las dos temporadas siguientes, sobre todo en 2023. El curso pasado, después de anotarse siete de las primeras diez carreras, no se impuso en ninguna de las siguientes diez; y acabó el año con ‘sólo’ nueve triunfos (con los que elevó a 63 su tercera marca histórica). Motivo por el que más de uno quiso ver cerca el final de su reinado.
Pero, hoy por hoy, ‘Mad Max’ será de nuevo el hombre a batir. Si gana otro Mundial, igualará las cinco coronas del argentino Juan Manuel Fangio -el gran astro de los años 50- y ya sólo tendrá por delante a los dos séptuples campeones del mundo, Hamilton y el alemán Michael Schumacher. Al que también emularía, ya que el ‘Kaiser’ es el único que ha logrado encadenar cinco títulos: los cinco que ganó con Ferrari entre 2000 y 2004; antes de ser destronado por el español Fernando Alonso.
McLaren, Ferrari y Mercedes quieren poner fin al reinado de ‘Mad max’
El inglés Lando Norris, subcampeón el curso pasado, y su compañero, el muy emergente australiano Oscar Piastri -recién renovado en un contrato ‘multianual’-, constituyen un argumento de peso para que McLaren -que 26 años después, volvió a ganar el título de constructores- aspire a acabar con el reinado de Verstappen. Un trono que, aparte del equipo de Maranello, también persigue Mercedes, escudería en la que Hamilton (seis veces campeón con las ‘flechas de plata’) ha sido reemplazado por el joven italiano Andrea Kimi Antonelli. De 18. Casi 22 años más joven que él.
El día que nació Antonelli -nuevo compañero del inglés George Russell- Alonso estaba disputando, como líder del Mundial y camino de su segundo título, los entrenamientos libres del Gran Premio de Turquía de 2006, en las afueras de Estambul.
Alonso espera que su tercer año en Aston Martin se parezca más al primero
En una segunda juventud a los 43 años, el doble campeón del mundo asturiano (el más veterano de la parrilla), con 32 victorias en la F1, intentará que su tercera temporada en Aston Martin se parezca más a la primera -en la que logró ocho de sus 106 podios en la categoría reina; y fue cuarto en el Mundial- que a la segunda -en la que su mejor resultado fue un quinto; y concluyó noveno el certamen-.
Eso, en espera de 2026, cuando entre en vigor el nuevo reglamento técnico y diseñe el coche el inglés Adrian Newey: el mejor ingeniero de la historia de la división de honor del automovilismo. Recién incorporado a la escudería de Silverstone; después de haber ideado, entre otros, los imbatibles monoplazas con los que tanto el alemán Sebastian Vettel, como Verstappen festejaron sus respectivos cuatro títulos con Red Bull.
Alonso, que debutó en la Fórmula Uno hace 24 años, seguirá formando dúo con el canadiense Lance Stroll -la pareja más longeva de las que empiezan el Mundial, junto a la de Norris y Piastri en McLaren-, pero tendrá un nuevo jefe de equipo, el inglés Andy Cowell; que releva en el cargo al luxemburgués Mike Krack.
Sainz, de Ferrari a Williams, equipo en el que será compañero de Albon
Sainz, de 30 años, que afronta su undécima temporada en la categoría reina, se estrena al volante de un Williams, después de haber pasado los último cuatro en Ferrari, con la que logró sus cuatro victorias y 25 de sus 27 podios en la F1. En la escudería de Grove, cuyo jefe de equipo es desde hace dos años el inglés James Vowles, el piloto madrileño tendrá un nuevo compañero: el tailandés Alex Albon.
El Mundial que arranca este fin de semana en Melbourne igualará al del año pasado como el de mayor numero de carreras de la historia. Se cerrará, después de 24 pruebas -entre ellas el Gran Premio de España, el 1 de junio, en Montmeló (Barcelona); y el de México, el 26 de octubre, en el Autódromo Hermanos Rodríguez de Ciudad de México-, con el Gran Premio de Abu Dabi: el 7 de diciembre.
Seis de los 24 Grandes Premios vuelven a tener formato sprint
Este año volverá a haber seis fines de semana con formato sprint, en los que a la carrera dominical se añade una reducida -sobre un tercio del recorrido- el sábado. Una prueba que reparte puntos entre los ocho primeros: ocho al ganador, siete al segundo y así sucesivamente hasta el octavo, que suma uno.
El segundo Gran Premio del año, el de China, la próxima semana y en Shanghái, albergará el primer sprint de la temporada. Los otros cinco se disputarán en los Grandes Premios de Miami (EEUU), Bélgica (en Spa-Francorchamps), Brasil (en Sao Paulo), Estados Unidos (en Austin) y Qatar (en Lusail).
Antonelli, Bortoleto y hasta un total de cinco debutantes este año
Una cuarta parte de los contendientes (cinco, en total) son debutantes. Al margen de Antonelli, se estrena como piloto oficial el inglés Oliver Bearman (19 años), que el curso pasado ya disputó tres carreras: una con Ferrari, en Arabia Saudí, en sustitución de Sainz, operado de urgencia de una apendicitis; y dos con Haas, su nuevo equipo, reemplazando al alemán Nico Hülkenberg en Azerbaiyán -por sanción- y en Sao Paulo -por motivos de salud-.
Hülkenberg, este año en Spike Sauber, será compañero de otro ‘rookie’, el brasileño Gabriel Bortoleto, último ganador de la Fórmula 2. El paulista relegó al segundo puesto en la división de plata, en un certamen que no se decidió hasta la última carrera -en Abu Dabi-, al francés Isack Hajder, asimismo de 20 años y que se estrenará con Racing Bulls (RB); el equipo nodriza de Red Bull.
El quinto debutante es el australiano Jack Doohan -hijo del quíntuple campeón mundial de 500 cc de motociclismo-, que ya se subió en la última carrera del año pasado, en Yas Marina, al Alpine. Escudería en la que es piloto reserva el argentino Franco Colapinto, que disputó las últimas nueve carreras del año pasado -y puntuó en dos- con Williams.
Lawson, nuevo compañero de Verstappen; en sustitución de ‘Checo’ Pérez
Después de 14 temporadas en la categoría reina, no estará en Australia el mexicano Sergio Pérez, subcampeón mundial hace dos años y que contribuyó a la consecución de los dos útimos títulos de constructores (2022 y 2023) de Red Bull.
El nuevo compañero de Verstappen es el neozelandés Liam Lawson, en RB el año pasado. Y el reciente anuncio de que en 2026 Cadillac será el undécimo equipo de la parrilla abre la puerta a un hipotético regreso de ‘Checo’, nacido hace 35 años en Guadalajara (Jalisco).
Sainz, último ganador en Australia, marcó la vuelta rápida de pretemporada
En Albert Park -pista semiurbana de 5.278 metros-, el viernes (noche del jueves en horario español) arrancarán los entrenamientos libres; que se completarán el sábado, horas antes de la calificación, que ordenará la parrilla de la carrera dominical. Prevista a 58 vueltas, para completar 306 kilómetros.
Antes de volver a hacerlo en México, Sainz logró el año pasado la victoria en Australia, un triunfo épico apenas dos semanas después de haber sufrido la citada operación de apendicitis en Yeda.
Carlos, quinto en el pasado Mundial, marcó la vuelta rápida en los test de pretemporada, hace dos semanas en el circuito de Sakhir (Bahréin), en el que los cronos no fueron seguramente del todo significativos y nadie mostró lo que realmente tiene; pero Norris dejó vislumbrar el mejor ritmo de carrera a bordo del McLaren.