Es el continuo debate en la Fórmula 1: ¿Más o menos carga aerodinámica? Lo cierto es que en este aspecto, la categoría va por rachas, unos años se apuesta por monoplazas más agresivos aerodinámicamente, y otros se reduce esta característica en favor de la potencia en recta. Desde 2017, tenemos una normativa más favorable para la aerodinámica, pero siempre existen detractores que la consideran una desventaja para los adelantamientos. Franz Tost, director de Toro Rosso, apuesta por regresar a las características de 2016.
Tost apuesta por monoplazas más inestables en las curvas, con el fin de mejorar el número de adelantamientos. Reducir la carga aerodinámica actual en un 40-50% es la solución según el de Toro Rosso, cosa que favorecería la velocidad en recta, y que llevaría como consecuencia a una zona de frenado mucho mayor.
“Tenemos mucha fuerza aerodinámica, lo que significa altas velocidades en las curvas, nadie puede seguirnos debido al aire sucio que hay detrás y apenas tenemos zonas de frenado. ¿Cómo debes adelantar? Eso significa que la FIA, FOM, y hay gente experimentada allí, como Ross Brawn, Pat Symonds, saben exactamente lo que debes hacer: bajar con el lado aerodinámico, con la fuerza hacia abajo. Cortaría un mínimo de 40-50% de la carga aerodinámica actual, para hacer que el coche sea mucho más inestable en las curvas. Entonces la gente ve que los pilotos tienen que pelear con él. Los monoplazas serán mucho más rápidos en la recta, tienes posibilidades de adelantar a alguien, debido al [aumento] del frenado, y puedes seguir en las curvas”, explicó.
Una queja por parte de Tost se relaciona con las comunicaciones entre la FIA y los equipos, ya que considera necesario que la organización pregunte a las escuderías a la hora de tomar decisiones. En cambio, todas las preguntas se dirigen al grupo de trabajo técnico, formado por ingenieros.
“¡Los equipos! Nunca preguntan a los equipos. Ellos vienen al Grupo de Trabajo Técnico. ¿Quién está en el Grupo de Trabajo Técnico? Ingenieros. ¡Nunca preguntes a los ingenieros!”, sentenció Tost.