Como es habitual en los últimos años, los equipos han tenido solo tres días de pruebas en esta temporada para familiarizarse y ajustar el rendimiento de los coches de cara al inicio del campeonato, que se llevará a cabo la próxima semana en Bahréin. Con un total de 24 horas, que deben dividirse entre ambos pilotos, comprender rápidamente las características del monoplaza y encontrar las sensaciones adecuadas al volante es esencial tanto para los ingenieros como para los pilotos.
Esta situación es común para muchos equipos este año, incluido Red Bull, que ha optado por realizar cambios significativos en el RB20. Mientras que otros equipos han seguido la dirección establecida por el RB19 e incluso han llevado ciertos conceptos al extremo, el equipo de Milton Keynes ha buscado redefinir su identidad, consciente de la necesidad de mantenerse innovador.
Incluso los rivales han elogiado las decisiones tomadas por el equipo dirigido por Adrian Newey y Pierre Waché, que se basan en la dedicación extensa al RB20, gracias a la ventaja acumulada desde el inicio de 2023. El nuevo monoplaza no solo destaca por su diseño exterior, sino también por cambios significativos en el sistema de refrigeración en comparación con años anteriores.
Este año, el equipo ha invertido mucho tiempo en el estudio del nuevo monoplaza, no solo a través de análisis aerodinámicos con pintura flow-viz y elementos de rastrillo, sino también mediante pruebas exhaustivas y específicas para comprender detalles particulares del coche. A pesar de las pruebas, el RB20 sigue siendo considerado como el coche de referencia por el resto del pelotón antes del inicio del Campeonato del Mundo, según señalaron los rivales.
Desentrañar los datos de estas pruebas es complicado, ya que muchos equipos se han centrado en programas específicos, dado que ya conocían los neumáticos que no han cambiado desde la temporada anterior. Al final de los tres días de pruebas, Max Verstappen mostró prudencia sobre el potencial del nuevo monoplaza, pero se percibió que se sintió más cómodo desde el primer día, enfocándose en tandas largas y comprensión del coche.
En cuanto al programa de pruebas, Verstappen se limitó a tres intentos con poca gasolina a bordo, concentrándose en tandas más largas y duraderas. Por otro lado, Sergio Pérez enfrentó más desafíos durante los tres días de pruebas, con contratiempos técnicos y problemas de sobrecalentamiento de frenos que afectaron su tiempo en pista.
A pesar de los desafíos, el equipo Red Bull parece liderar nuevamente la competición antes del inicio del campeonato. La atención se centrará en cómo abordarán las tandas de rendimiento durante el fin de semana de carrera y cómo evolucionarán con las prometidas actualizaciones en las primeras etapas del campeonato.
