Ferrari tuvo la gloria, pero se le escapó. Las seis horas de SPA, que tanto pudieron haber sido 4, como ocho, por la bandera roja, tuvieron dos carreras distintas. Antes del accidente que provocó el parón Ferrari dominaba y ya se veían como ganadores con un doblete, eso sí, estaban peleando con Porsche. Pero tras la bandera roja, las 2 horas restantes fueron dominadas únicamente por Porsche, que se coronaron con un doblete en la tercera prueba del WEC.
A los dos Porsche 963 nº12 y nº6 solo les hizo falta detenerse en boxes justo antes del accidente para aprovechar el golpe de suerte de la bandera roja y tomar el control en la reanudación de la carrera, mientras sus rivales se veían obligados a parar para evitar la avería.
Con la bandera verde todo dio un vuelco. El Ferrari #51 perdió el liderato y los Porsche se vieron en cabeza con casi un minuto de ventaja. Solo quedaba esperar una milagrosa remontada de un Ferrari que había demostrado muchísimo ritmo durante las primeras 4 horas. Pero los alemanes no desperdiciaron el golpe de suerte de la bandera roja y firmaron un doblete.
El equipo italiano se tuvo que conformar con un podio del coche de Molina, que les sabe a poco habiendo visto el inicio de la carrera y que tenían muchas opciones a pintar los dos primeros escalones del podio de rojo. Con este doblete los alemanes llegan más líderes a Le Mans, pero sabiendo que Ferrari está cerca en cuanto ritmo, aunque la clasificación diga otra cosa.
De esta manera, la tercera prueba fue ganada por el Porsche 963 de Team JOTA, conducido por los británicos Will Stevens y Callum Ilott, a bordo del cual completaron 141 vueltas y superaron por más de 12 segundos al Penske Motorsport. El podio de Hypercar lo completó la Ferrari 499P de Antonio Fuoco, Miguel Molina y Nicklas Nielsen.
Le Mans, a la vista
La siguiente carrera del mundial de Resistencia WEC serán las emblemáticas 24 horas de Le Mans, donde se correrán unos entrenamientos el 8 y 9 de junio y una semana después será la esperada carrera.