El Rally Montecarlo es un evento inigualable, lleno de trampas en cada curva y especial. El segundo día del Mundial de Rallyes (WRC) 2025 trajo cambios dramáticos. Los más de 18 kilómetros de La Bréole / Selonnet transformaron la carrera y golpearon duramente al campeón del mundo, Thierry Neuville. El belga, quien había liderado tras la primera noche, perdió su posición privilegiada, cediendo el mando a Sébastien Ogier. El ‘Maestro’ del Principado ahora lidera con una ventaja de 12,6 segundos sobre Elfyn Evans, consolidándose como el claro favorito, más aún con el regreso de un formato tradicional en el que los sábados no suman.
El tercer tramo del bucle matinal cambió el rumbo del rally. La jornada comenzó con complicaciones debido a la suciedad en el asfalto, la mejora de Kalle Rovanperä y un segundo tramo suspendido por la caída de piedras que hirieron a dos espectadores. En el tercer tramo, Neuville perdió el control en una horquilla, incapaz de frenar su i20 a tiempo, lo que lo llevó contra un talud. Con una rueda fuera y casi dos minutos perdidos, su carrera quedó arruinada. “Aún no tengo toda la confianza con los neumáticos [los nuevos Hankook]”, explicó el belga.
En la misma especial, Ott Tänak también enfrentó dificultades. Intentó apurar al límite, pero se enganchó en una cuneta, dejando la parte trasera de su i20 destrozada. Aunque evitó problemas mayores, quedó atrapado en un Montecarlo apretado, con Evans y Ogier liderando como los mejores de Toyota, y Fourmaux destacándose como el más consistente de Hyundai.
Ogier acelera
Durante las segundas pasadas, el panorama del Montecarlo se perfiló para las jornadas finales. Neuville no logró recuperarse y cerró la jornada en la novena posición tras otra salida en la misma curva de la mañana. En esta ocasión, perdió también la delantera, un duro revés en su debut con el ‘1’ en la puerta.
El drama no se limitó a Neuville o Tänak. Evans, quien había tenido un buen inicio, encontró problemas en su primera y única pasada por Saint-Léger-les-Mélèzes / La Bâtie-Neuve. En una zona de hielo, perdió el control del coche y no pudo salvarlo usando el acelerador y el freno, cediendo terreno. “Me sentía como Bambi”, comentó con humor.
Esto permitió que Ogier tomara la delantera. Como es habitual, el francés demostró ser un maestro en condiciones complicadas. Logró el mejor tiempo y refrendó su liderato en el último tramo del día, ya con la noche cayendo sobre La Bréole. Su habilidad para adaptarse a condiciones variables y su técnica impecable marcaron la diferencia. Golpe sobre la mesa y sello de identidad.
Aunque su ventaja no es abrumadora, con Evans a 12,6 segundos y Fourmaux a 14,2, Ogier está en una posición inmejorable para repetir su corona en el icónico Montecarlo. Rovanperä, en cuarta posición, ya está a 38,5 segundos del liderato, una brecha considerable.
Clasificación:
- Ogier
- Evans +12.6
- Fourmaux +14.2
- Rovanperä +38.5
- Tänak +47.3
- Munster +1:33.7
- Katsuta +1:37.7
- Pajari +3:32.9
- Neuville +3:58.6
- Gryazin +5:25.4
