NASCAR ha sancionado a varios equipos por una posible manipulación de la carrera en la competencia de la Copa en Martinsville. Los equipos afectados son el Toyota Nº 23 de 23XI Racing conducido por Bubba Wallace, el Chevrolet Nº 3 de Richard Childress Racing de Austin Dillon y el Chevrolet Nº 1 de Trackhouse Racing de Ross Chastain, tras revisar las comunicaciones por radio del domingo.
Las penalizaciones son uniformes para los tres equipos y sus pilotos: una multa de 100,000 dólares, la deducción de 50 puntos tanto para el piloto como para el propietario del equipo, y la suspensión de una carrera para los jefes de equipo, spotters y ejecutivos clave.
Desglose de las sanciones para cada equipo: En 23XI Racing, el ejecutivo Dave Rogers, el jefe de equipo del Nº 23 Bootie Barker y el spotter Freddie Kraft han sido suspendidos. La penalización de puntos hace que Wallace descienda del 17º al 18º lugar en la clasificación del campeonato.
Para Trackhouse Racing, el ejecutivo Tony Lunders, el jefe de equipo del Nº 1 Phil Surgen y el spotter Brandon McReynolds también han sido suspendidos, aunque la posición de Chastain en la clasificación se mantiene en el 19º puesto.
En Richard Childress Racing, el ejecutivo Keith Rodden, el jefe de equipo del Nº 3 Justin Alexander y el spotter Brandon Benesch recibirán suspensiones de una carrera. La pérdida de puntos afecta considerablemente a Dillon, quien baja del 28º al 33º lugar en la clasificación.
Los tres equipos planean apelar las sanciones. 23XI Racing ha emitido un comunicado afirmando: “Somos conscientes de la sanción emitida por NASCAR derivada de la carrera del domingo en Martinsville. Creemos firmemente que no cometimos ninguna infracción y apelaremos la decisión de NASCAR”.
¿Qué ocurrió? Estas sanciones se derivan de incidentes durante las últimas vueltas de la carrera eliminatoria de la Ronda de 8. Christopher Bell, una vuelta atrás, no podía avanzar en posiciones, mientras que William Byron, con neumáticos desgastados, peleaba cerca del frente, con solo un punto separándolo de la eliminación. Dillon y Chastain bloquearon a Byron, corriendo lado a lado sin intentar adelantarlo y evitando que otros pilotos desafiaran al Nº 24. Durante la carrera, el equipo del Nº 3 mencionó abiertamente un “trato” e instruyó al jefe de equipo de Dillon para comunicarse con el de Chastain.
Mientras tanto, Wallace, que iba media vuelta delante de Bell, expresó por radio su intención de ayudar a un coche de Joe Gibbs Racing. Posteriormente, Wallace redujo drásticamente la velocidad, alegando problemas de neumáticos, aunque su spotter confirmó que los neumáticos estaban en buen estado. Su ritmo fue inconsistente, y en la última vuelta, Bell logró alcanzarlo y adelantarlo justo antes de la línea de meta, asegurando un punto crucial que lo clasificó temporalmente al Championship 4. Sin embargo, 27 minutos después, NASCAR sancionó a Bell por un incidente al rozar el muro tras superar a Wallace.