Mercedes ha sido el primero en mostrar cómo será la Fórmula 1 post-coronavirus. Los vigentes campeones han llevado un W09, el monoplaza con el que ganaron el campeonato de 2018, al circuito de Silverstone para dar unas cuentas vueltas con las que sus pilotos se quiten el óxido de los últimos meses sin competición.
Más allá de recuperar automatismos, recordar pautas e incluso probar algunas piezas que llevará el coche de este año, los ensayos de Valtteri Bottas el martes y que continúa Lewis Hamilton este miércoles sirven para poner en marcha los nuevos protocolos sanitarios en los boxes.
Los ingenieros, mecánicos y responsables de los equipos lucieron mascarillas, guantes y pantallas protectoras en todo momento. Es de vital importancia para su trabajo acostumbrarse a estos complementos de seguridad sanitaria que a partir del 3 de julio tendrán que llevar en los circuitos de Fórmula 1 con los que se reanudará la competición. El propio Bottas también usó la mascarilla en todo momento mientras estuvo fuera del monoplaza.
Después de más de 100 días sin hacer sonar sus motores, Mercedes volvió a pista.
El cumplimiento estricto de las medidas de seguridad sanitarias será obligatorio para todos. El riesgo de contagio de coronavirus en los circuitos se minimizará lo máximo posible, e incluso si se detecta algún positivo ya hay en marcha un plan para aislarle y dejarle en cuarentena.
Desde la organización quieren demostrar que, al ser uno de los primeros campeonatos que recorra varios países, tienen la capacidad de limitar el riesgo al máximo, por lo que ensayos como los que está realizando estos días Mercedes serán críticos.
