A tan solo nueve días de haber concluido con sus compromisos dentro de la Fórmula 1, Marcus Ericsson manejó por primera vez un auto del Schmidt Peterson Motorsports, este martes en Sebring.
El sueco emigró a la IndyCar tras perder su asiento en Sauber dentro de la Fórmula 1, categoría en la que permaneció 5 temporadas.
El piloto se mostró muy entusiasmado al bajar del auto. No perdió oportunidad de mencionar la gran diferencia entre ambas categorías.
“Esto me hizo recordar el por qué amo este deporte. La F1 siempre será la F1, pero en ciertos aspectos es un tanto artificial. Siempre viajas a estos lugares perfectos y para mi, eso no es competir. Esto me devolverá la pasión por las carreras.”
“Como piloto debes trabajar mucho más con este auto. En la F1 los autos siempre comienzan siendo perfectos, aquí tienes que lidiar con lo que tengas y tú debes perfeccionarlo. Es un trabajo para el conductor, me gusta eso, y sin duda es la mayor diferencia que puedo notar entre ambas categorías.”
El gerente general del Schmidt Peterson Motorsport, Taylor Kiel se mostró contento con el desempeño de Ericsson en el auto.
“Estoy totalmente impresionado por su perspectiva en esta prueba. Usualmente cuando un piloto entra por primera vez en un auto se concentra más en sus tiempos, Marcus se tomó el tiempo para entender varios aspectos; como entrar al pit lane, que hacer mientras esta ahí y qué hacer al salir de ahí. Son cosas básicas pero la mayoría no se toma el tiempo para aprenderlas. Él respondió rápidamente a todas estas peticiones.”
La primera carrera de la temporada 2019 será el 10 de marzo en las calles de St. Petersburg.