En tiempos de abundancia, cuando los patrocinadores derrochaban dinero, la Fórmula 1 disfrutaba de algunos de los eventos de presentación más extravagantes jamás vistos. Un ejemplo icónico fue en 2007, cuando Fernando Alonso y Lewis Hamilton recorrieron las calles de Valencia en un espectáculo memorable.
La búsqueda de la gran presentación
Sin embargo, con el paso de los años y la eliminación de las pruebas privadas, estos eventos de presentación han perdido parte de su relevancia. Aunque siguen atrayendo a grandes multitudes, ya que los aficionados están ansiosos por cualquier contenido relacionado con la F1 durante la pretemporada, muchos de estos eventos terminan siendo decepcionantes. Ya sea por diseños demasiado continuistas, por mostrar prototipos que apenas se parecen a los coches reales que competirán, o por estar acompañados de largas sesiones de contenido que aportan poco al universo de la F1.
A pesar de esto, las escuderías siguen valorando estos espacios exclusivos donde son el centro de atención a nivel mundial. La prensa se vuelca en sus presentaciones, y renunciar a ese protagonismo, por ejemplo, realizando un evento conjunto, podría hacer que algunos equipos pasaran a un segundo plano.
Los intentos de Liberty Media
Liberty Media, la actual propietaria de la Fórmula 1, no ha dejado de trabajar en la idea de revitalizar estos eventos. En 2022, cuando se estrenaba la última normativa técnica, la F1 insistió en dar relevancia a las presentaciones. Se exhibieron varios modelos genéricos proporcionados por la FIA, y aunque hubo intentos de limitar la cobertura mediática de los test iniciales, no se llegó a concretar un evento conjunto por falta de acuerdo o tiempo para negociarlo.
No obstante, la idea no ha muerto. Liberty Media sigue buscando una fórmula que satisfaga a todas las partes y que, además, se pueda monetizar tanto de manera presencial como televisiva. De hecho, un gran evento de presentación conjunta podría llegar en 2025.
El O2 Arena como escenario
Según algunas fuentes, como Jeppe H. Olesen, el lugar seleccionado para este evento sería el O2 Arena en Londres, también conocido como The Dome. Se pondrían a la venta unas 18.000 entradas, lo que generaría ingresos adicionales significativos. Además, esto no sería incompatible con las presentaciones individuales de los equipos, aunque aún queda por decidir si este gran evento tendría lugar antes de la primera jornada de pruebas o justo antes del inicio de la temporada en Australia.
