Daniel Suárez estará haciendo historia al honrar sus raíces mexicanas, el próximo domingo 16 de agosto, en la carrera trascendental que se realizará en el circuito del Daytona International Speedway el domingo a las 3 pm. Esta es la primera vez que las tres series nacionales principales de NASCAR competirán en el circuito mixto de 3.56 millas.
Suárez cubrirá su rostro con un tapabocas inspirado en Blue Demon Jr., uno de los luchadores más reconocidos en el mundo de la lucha libre mexicana. De esta manera, el regiomontano se convertirá en el primer piloto de NASCAR que expone en una plataforma nacional uno de los símbolos socioculturales más representativos de México.
La lucha libre mexicana es un deporte-espectáculo que requiere técnica, destreza y fortaleza física, y en el cual los luchadores cubren sus rostros con máscaras.
El cubrebocas inspirado en Blue Demon Jr. que utilizará Daniel Suárez fue diseñado por Gabriel Ramirez, oriundo de San Jose, California y de ascendencia mexicana, cuyo negocio se vio afectado por las regulaciones estatales debido a la pandemia COVID-19. Situación que lo obligó a cerrar temporalmente sus puertas al público, por lo que el comerciante mexicano reporta que sus ganancias se vieron gravemente afectadas al verse forzado a no poder dar las clases de lucha libre que solía ofrecer en su local.
Pese a no generar ingresos, Ramirez tenía que poder seguir pagando por el alquiler de su local y, además, debía proveer para su familia. Estas circunstancias lo motivaron a utilizar su creatividad y es así que surge la idea de diseñar y vender estas mascarillas tan originales, las cuales son muy necesarias actualmente. Hasta el momento, Ramirez ha vendido miles de estos originales cubrebocas, siendo el de Penta Cero Miedo, el más popular.
De esta forma, Suárez espera mostrarles a los fanáticos de NASCAR parte de su cultura y a su vez, apoyar a los mexicanos que son dueños de pequeñas y medianas empresas en este país. Según una encuesta realizada por la Iniciativa de Emprendimiento Latino de la Universidad de Stanford, el 86% de los comerciantes latinos del país reportan efectos negativos inmediatos como consecuencia del COVID-19.
