La brasileña Alline Cipriani conquisto este fin de semana en Daytona, Estados Unidos, un título inédito para el automovilismo brasileño. Cerró la temporada 2018 de Trans Am GT como ganadora de la categoría TA3 a bordo del Ginetta G55. Tanto la brasileña como su equipo son debutantes así que además del campeonato se llevan la presea de Debutante del año y Mejor equipo.
“Los otros autos son más rápidos que el nuestro, pero eso demuestra la consistencia que hemos logrado.” Comentó Alline.
Cipriani se convirtió en piloto profesional en 2011 a los 28 años de edad.
“Comencé tarde en el automovilismo, pero no en el deporte. Fui nadadora profesional hasta los 18 años y después competí en carreras de Jet Ski.”
Tras un grave accidente dentro de ese deporte, Aline decidió cambiar a un deporte más seguro.
“Me rompí fémur, cadera, costilla, me quedé un mes en cama. Así que decidí cambiar de deporte.”
La brasileña comenta que todo comenzó como una apuesta entre ella y su marido.
“Surgió como una broma entre mi marido y yo. Él me aseguro que no lo lograría. Fui aprobada y de ahí he ido hacía adelante. Estuve en Audi DTCC, en endurance en Brasil, Copa Volvo, Sprint Race y de ahí a Estados Unidos.”
Desde entonces ha pasado 7 años en las pistas a excepción de la pausa que tomó el año pasado para tener a su bebé, curiosamente lleva el nombre de Enzo.
“Estar de regreso y con un campeonato es increíble, muestra la dedicación del equipo y mía. Fue un año espectacular.”
Cipriani también comenta que le gustaría ver a más mujeres dentro del automovilismo.
“Me gustaría ver a más mujeres en este deporte. Espero que este triunfo les sirva de motivación a muchas chicas allá afuera. Es un deporte fantástico y es importante recalcar que no es solo para hombres.”
Ahora una mujer vence a 26 pilotos, tal vez sea capaz de terminar con el prejuicio de que solo los niños juegan con carros.