Sébastien Loeb piloto francés nueve veces campeón del mundo ha aceptado el papel de apoyo al equipo conformado por Neuville y Hyundai para la temporada 2019.
Tras una larga trayectoria y siempre destacar como el piloto número 1 en su equipo, en las categorías en las que ha competido y en las principales estadísticas de la historia del WRC. Llegó el momento de asumir un nuevo rol el cual, probablemente, nunca hubiera pensado en cubrir en el pasado.
Son nueve títulos mundiales en su haber y a los 44 años de edad, Loeb aceptó una propuesta de Hyundai y por la que tendrá que ser el segundo piloto, detrás de Thierry Neuville.
“Con Peugeot y Citroen no pudimos encontrar un buen arreglopara ambas ambas partes. Yo no quería dejar de competir a niveles altos, tenía que encontrar una alternativa. Competir es parte de mi ADN, estuve muy feliz de correr las tres fechas en el WRC en 2018, por lo que rápidamente acepté la opción de Hyundai, que me ofreció seis carreras como segundo en el equipo”, comentó Loeb.
“También tuve otras opciones, pero en el fondo estaba convencido del proyecto Hyundai y no quería perder el tiempo con las otras propuestas”.
Así, Loeb decidió intentar ayudar al equipo a ganar el Campeonato de Constructores y ponerse a disposición de Neuville y apoyarlo en conquistar lo que sería su primer título mundial.
“Durante mucho tiempo estuve en el papel del piloto número uno de un equipo, siempre luché por la victoria, pero con Hyundai mi misión será ayudar al equipo a ganar el Campeonato Mundial de Constructores y ayudar a Neuville a ganar el título de Pilotos, él es el número 1”, declara Loeb.
El acuerdo con el equipo fue claro: “Detuve mi carrera en WRC por cinco años, ya no tengo el ritmo de los pilotos actuales ni el conocimiento de las rutas en general, es fantástico que un fabricante como Hyundai haya confiado en mí a pesar de las cosas que acabo de mencionar. Estaré encantado de tomar la posición de segundo o tercero del equipo, correré con menos presión, para complacer y tratar de ayudar al equipo a obtener puntos”.
Pese a la disposición de ayudar, Loeb advierte: “Esto no significa que se perdió mi alma como piloto, pues una vez que me ponga el casco, daré todo para obtener el mejor resultado posible, como siempre lo he hecho”.