El piloto regiomontano, Rafa Martínez, tuvo una tarde complicada en el autódromo de Cajititlán durante la penúltima fecha de la temporada de NASCAR PEAK México. Un contacto, cuando apenas transcurrían los primeros minutos de la competencia, acabó con las aspiraciones del piloto del auto #90 de Motorcraft de conseguir un buen lugar frente al público tapatío.
Con un lleno total en las gradas en el Trióvalo de Guadalajara, se desarrolló la undécima fecha de la temporada, en lo que fue una carrera por demás accidentada y con varias banderas amarillas ondeándose a lo largo de los 80 minutos de duración.
Martínez arrancó desde la décimo octava posición, con el objetivo de remontar lugares, confiando en el gran trabajo del Tame Racing, pero el contacto a tan sólo dos minutos de aparecer la bandera verde afectó considerablemente el balance de auto de Motorcraft.
El equipo de mecánicos hizo los ajustes para tratar regresar el auto a la pista, sin embargo, los daños eran mayores y no fue posible recuperar un buen ritmo, viéndose obligado a abandonar la carrera cuando estaba por cumplirse la mitad del tiempo pactado.
El experimentado piloto cruzó la meta en el sitio veintidós, y ahora se enfoca en el siguiente y último compromiso de la temporada, en donde desea retribuir la confianza de Motorcraft con un buen resultado.
“Ya dimos vuelta a la página, fue una carrera en la que muchos pilotos se vieron afectados por los contactos y nos tocó también a nosotros, teníamos un auto para quedar al menos en el Top 10, ahora a pensar en el Hermanos Rodríguez, llegaremos con muy bien preparados para conseguir un buen resultado” Finalizó Rafa Martínez.
La gran final de la temporada se llevará a cabo el próximo 1 y 2 de diciembre en el coloso de Santa Úrsula, que nuevamente se llenará de adrenalina y en el que se espera una gran asistencia del público capitalino.
