Alpine está considerando dejar de usar motores Renault en la Fórmula 1 a partir de 2026 y ha iniciado conversaciones con otros fabricantes sobre la posibilidad de un nuevo acuerdo.
Como parte de una evaluación de su proyecto de F1, motivada por el difícil inicio de la campaña actual, se ha revelado que los altos directivos de Renault y Alpine están investigando todas las opciones para mejorar su desempeño.
Dado que la actual unidad de potencia Renault tiene un rendimiento inferior en comparación con sus competidores y sin certeza de mejorar para la próxima generación de motores turbo híbridos en 2026, se ha cuestionado si la gran inversión necesaria para producir su propio motor es esencial.
Se está considerando un plan para que Renault abandone el desarrollo de su unidad de potencia para 2026 y Alpine se convierta en un equipo cliente.
Fuentes indican que el director del equipo Alpine, Bruno Famin, ha estado evaluando la situación y manteniendo conversaciones con otros fabricantes para explorar opciones alternativas.
La solución más lógica para Renault sería obtener motores de Red Bull, que tendrá sus propias unidades de potencia a partir de 2026. Sin embargo, debido a complicaciones logísticas, un acuerdo con Red Bull parece poco probable ya que el equipo tiene que suministrar motores a sus propios equipos.
Christian Horner, director del equipo Red Bull, mencionó el año pasado: “No queremos sobrecargarnos. Suministrar a dos equipos en 2026 probablemente sea un poco demasiado en el primer año”.
Si el acuerdo con Red Bull no se materializa, la opción más probable sería Mercedes, que tendrá disponibilidad para 2026 debido al cambio de Aston Martin a Honda.
Los acuerdos de Mercedes con Aston Martin y McLaren demuestran que no tiene problemas en suministrar motores a otros equipos, ya que no ve ninguna desventaja comercial en estos acuerdos.
Si Alpine decide seguir el camino de convertirse en un equipo cliente y no puede llegar a un acuerdo con otro fabricante, las reglas de la F1 indican que uno de los proveedores actuales de motores debe suministrarle uno para evitar que se quede sin unidad de potencia. Honda podría ser el proveedor, ya que es el único que no tiene planes para un segundo equipo cliente en 2026.
Compromiso de Renault
Aunque la situación de los motores de Alpine está en cambio, el CEO de Renault, Luca de Meo, ha reafirmado recientemente su compromiso con el futuro de Alpine en la F1, a pesar del interés de potenciales compradores.
En declaraciones a Autocar, dijo: “No venderemos ni siquiera una parte. No necesitamos el dinero. He recibido ofertas, pero no nos interesa. Sería estúpido y no lo haré”.
De Meo también señaló que Renault nunca ha dominado las reglas de los motores turbohíbridos, lo que ha afectado su rendimiento en el ciclo reglamentario actual.
“Cuando empezamos la era híbrida en 2014, nuestro motor no rindió. Incluso el motor que desarrollamos en 2021 tenía una desventaja de 0,2s a 0,5s por vuelta. Y este año hemos tenido problemas con el coche. Si sumamos todo, estamos a 1,5s de donde deberíamos estar”.
Cambiar a motores de otros fabricantes podría resultar en unidades de potencia más baratas y competitivas para Alpine. Además, convertir a Alpine en un equipo cliente podría facilitar una futura venta del equipo, ya que no estaría vinculado a la herencia del departamento de motores de Viry-Chatillon.
Viry, sede de Renault Sport Racing, ha diseñado y producido los motores de F1 de Renault desde los años 70. Aunque un alejamiento de la F1 sería un cambio drástico, Renault podría involucrarse en otras competiciones automovilísticas, como el desarrollo del motor de su hipercoche del WEC.
Alpine declinó hacer comentarios sobre esta situación cuando Motorsport.com se puso en contacto con el equipo.