La bomba del mercado ha saltado. No se trata del fichaje de un piloto, sino de la posible salida de Adrian Newey de Red Bull. La pérdida del reputado ingeniero podría estar al nivel de una pérdida de Max Verstappen, ya que es la mente pensante de muchas de las máquinas más rápidas en la historia de la Fórmula 1.
El británico tiene contrato con Red Bull, pero se dice que la guerra de poder que ha estallado en Red Bull, con el ‘caso Horner’, le ha desilusionado y que, a sus 65 años, quiere buscar nuevas aventuras. Cuando renovó a mediados de 2023, firmó un acuerdo muy complejo, que podría hacerle muy difícil el poder salir de la escudería con sede en Milton Keyes. Hay soluciones, eso sí y todas pasan por el dinero.
Con ese nuevo contrato, el actual, podría sufrir el famoso ‘gardening’ en la F1, una cláusula que podría impedirle unirse a un equipo rival de Red Bull durante 12 meses si abandona el equipo, lo que haría que no estuviese disponible hasta 2027. Si el director técnico quiere salir del equipo austríaco tendría que llegar a un acuerdo con el mismo equipo, por mucha cantidad de dinero, evidentemente.
Aún no ha habido ninguna comunicación formal para abandonar el equipo, ni tampoco ha presentado ninguna dimisión. Las informaciones que salieron el jueves decían que Newey habría explicado su deseo de abandonar el equipo en privado a algunos trabajadores.
Ferrari y Aston Martin, las opciones prioritarias
La noticia de que Adrian newey quiere abandonar Red Bull ha alimentado más los rumores de una posible llegada a Ferrari o Aston Martin, ya que ambas escuderías han intentado ficharle. Los dos equipos se marcan grandes objetivos de cara a 2026 y Newey sería una pieza clave.
En Maranello es vital el coche de 2026, porque hay un cambio de reglamento y quieren volver a la gloria muchos años después. Por lo que sería esencial para ellos que el ingeniero británico se uniera al equipo en 2025 y muy pronto, para empezar a trabajar en el que podría ser el retorno de los italianos a los más alto.
Por lo que la escudería del caballo rampante ya sabe que si quiere traer al director técnico de Red Bull tiene que desembolsar una gran cantidad de dinero, no solo para su sueldo, sino para que pueda abandonar su actual escudería y trabajar desde ya con ellos. Hay que tener en cuenta que si Red Bull bloquea a Newey hasta 2027, se uniría a un nuevo equipo pensando ya en el coche de 2028, donde, además, él tendría cerca de 70 años y podría estar cerca de su retiro.
Tampoco hay que descartar a Aston Martin, que este mismo año han hecho una gran oferta al ingeniero, aunque en Red Bull lo desmintieron. Además, tienen el atractivo de que tienen sede en Silverstone y el cambio para Newey no sería tan drástico, ya que si se uniese a Ferrari tendría que pasar del Reino Unido a Maranello. También tiene viejos conocidos en la escudería de Lawrence Stroll, como Dan Fallows, con quién trabajó en el pasado.
Un acuerdo complicado
Por lo tanto, la situación está clara. La única solución que hay para ‘sacar’ a Newey de Red Bull si, como se dice, quiere abandonar el equipo es desembolsando una gran cantidad de dinero para que todas las partes interesadas (Newey, red Bull y el nuevo equipo) lleguen a un acuerdo para rescindir el contrato actual.
Un acuerdo de estas características sería comprobable muy caro, estaríamos hablando de cifras astronómicas y de uno de los acuerdos más grandes, en ingenieros, de la historia de la F1, ya que en Red Bull no les interesaría para nada dejar marchar a Newey a uno de sus máximos rivales.
