La Fórmula 1 está preparada para aprobar los planes de carreras al sprint antes del GP de Portugal, y la votación oficial comienza este lunes.
Tras largas discusiones sobre la idea de celebrar tres carreras al sprint este año, se ha establecido un marco de reglas más un paquete financiero adicional entre los equipos y los jefes de la F1.
El asunto aún debe pasar por los canales formales para ser incluido en el reglamento, proceso que ya está en marcha.
La Comisión de la F1, que se reunirá este lunes, someterá a votación el formato de carrera al sprint, y habrá un plazo de 48 horas para las respuestas.
Para que se apruebe las carreras al sprint se necesitará una “supermayoría” de 28 de los 30 votos de la comisión. Cada equipo tiene un voto, mientras que la FIA y el titular de los derechos comerciales de la F1 tienen 10 votos cada uno.
Sin embargo, la F1, la FIA y todos los equipos están de acuerdo con los planes para las carreras al sprint, por lo que parece ser una mera formalidad que el asunto obtenga el apoyo necesario.
Un anuncio oficial que confirme las carreras de clasificación al sprint podría llegar de forma inminente y casi con toda seguridad se publicará antes del Gran Premio de Portugal del próximo fin de semana.
El plan de clasificación al sprint consistirá en celebrar tres carreras de 100 kilómetros los sábados en Silverstone, Monza e Interlagos este año para ver qué impacto tiene en el espectáculo televisivo y en la pista.
El viernes de cada uno de estos grandes premios se celebrará una sesión de clasificación normal, la carrera clasificatoria al sprint del sábado decidirá la parrilla de la carrera principal del domingo y ofrecerá un pequeño número de puntos (3-2-1) para los tres primeros clasificados.
Uno de los mayores obstáculos que la F1 tenía que superar para el formato de carreras al sprint era el paquete financiero para los equipos, en medio de la preocupación de que daños importantes por accidentes el sábado pudiera llevar a los equipos al límite del presupuesto.
Al final, se llegó a un acuerdo por valor de unos 500.000 dólares (413.000 euros) para cada equipo, con la posibilidad de aumentar el límite de gastos de un equipo individual si se produce un accidente notable en las carreras al sprint.
